Hoshinoya Fuji

Hoshinoya Fuji está casi oculto por los bosques que lo rodean, situado a 100 metros en la ladera de una montaña. Frente a él se extiende el lago Kawaguchi, y en la orilla opuesta está el monte Fuji. Por el bosque serpentean escaleras y caminos de madera que conectan terrazas y plataformas a distintos niveles: en una hay una hoguera que arde día y noche para dar la bienvenida a todos; en otra puede haber un salón, un rincón perfecto para leer o mesas preparadas para comer. Siempre hay algo para entretenerse y deleitarse.

Explore los senderos de hierba —mejor descalzo— que atraviesan el bosque de 15 hectáreas, practique piragüismo a primera hora de la mañana o monte a caballo. Las cabañas son arquitectónicas, minimalistas pero acogedoras, e invitan a la contemplación del lago y las montañas, y a una noche de sueño muy profundo tras una velada obsevando las estrellas. Los balcones están pensados para descansar, muchos de ellos con su propia hoguera de sobremesa para tomar un whisky y conversar hasta altas horas de la noche.