Okutama 奥多摩

Okutama, en el extremo occidental de Tokio, ofrece magníficas oportunidades de actividades al aire libre, con sus montañas exuberantes, lagos preciosos, una cueva de piedra caliza y un entorno tranquilo para los viajeros que busquen relajarse. Por su proximidad al centro de la ciudad, es un destino ideal para una excursión de un día.

Puedes acceder a Okutama en tren en un trayecto de 90 minutos desde el centro de Tokio.

Desde la estación de Shinjuku, toma la línea JR Chuo hacia Nakano. Haz transbordo a la línea Ome en la estación de Tachikawa y bájate en Okutama.

La línea rápida Chuo Holiday Rapid Okutama opera los fines de semana y cubre el trayecto directo entre las estaciones de Shinjuku y Okutama.

El monte Mitake ofrece una gran variedad de oportunidades de senderismo, incluida una ruta que atraviesa el Jardín de Rocas, un popular valle arbolado con multitud de rocas cubiertas de musgo. Si prefieres el trekking, sigue la ruta Mikashi Michi, que sale de la estación de Okutama y lleva hasta el lago homónimo por un camino lleno de casas tradicionales. El ciclismo es otra de las prácticas favoritas de la zona.

Si te apetece una bebida en el campo, embárcate en el recorrido gratuito por la fábrica Ozawa y descubre cómo elaboran el sake japonés o nihonshu. La fábrica cuenta con cuatro visitas guiadas diarias. Tendrás que reservar con antelación. Lo mejor de la visita es que tendrás la oportunidad de degustar más de diez variedades de sake al finalizar el recorrido.

Si te entra hambre, en la cafetería venden tentempiés como baozi —bollos de pan rellenos—, o puedes disfrutar de una comida en el restaurante de tofu.

Las instalaciones cuentan con el jardín Sawanoi-en, donde podrás disfrutar de una copa mientras admiras la belleza natural de Okutama.

¿Se te ha despertado el espíritu aventurero? Pues adéntrate en las profundidades de la cueva de piedra caliza de Nippara y déjate seducir por sus formaciones rocosas naturales con millones de años de historia. La zona principal está iluminada con efectos de varios colores.

En algunas partes de la cueva hay estatuas budistas y objetos de culto que hacen que el entorno sea aún más mágico. Uno de ellos se dice que concede las plegarias relacionadas con el amor. La temperatura en el interior de la cueva se mantiene a unos 11 °C a lo largo del año, excelente para escapar del insufrible calor de verano de Tokio.

El río Tama es el más extenso de toda la región de Tokio y cuenta con un tramo que discurre por Okutama. Aléjate del barullo de la ciudad, disfruta de un pícnic a la orilla del río y remoja los pies en las frescas aguas dulces. O también puedes pasar un rato divertido con alguna de las actividades al aire libre que se ofrecen en la zona, como pescar, ir en kayak, o practicar surf de remo o descenso de ríos.

Este lago es una de las joyas de la zona. Disfruta de las vistas mientras cruzas el puente flotante Mugiyama, que se balancea sobre bidones de petróleo vacíos. De ahí que muchos habitantes de la región se refieran a él como el «puente bidón». La estructura se tambalea al apoyar los pies, añadiendo emoción a la experiencia.

Cada estación del año resalta un aspecto de la zona, y el otoño hace que Okutama sea excepcional. Las hojas de los bosques abandonan su habitual color verde y toman intensas tonalidades rojas, naranjas y amarillas. La experiencia es aún más gratificante con el crujido al pisar las hojas que yacen en el suelo.