Ogi 小城

Ogi, una pintoresca ciudad de pequeñas dimensiones, es un rincón perfecto donde ir a pasar el día si estás en Saga , ya que se trata de un enclave con una belleza natural espectacular para hacer senderismo y con una pequeña pista de esquí en invierno. No te olvides de hacer la ruta de senderismo hasta la cascada.

Dada su ubicación, a menos de 20 minutos en tren de la estación de Saga en la línea JR Karatsu, llegar a Ogi en transporte público es relativamente sencillo.

En la estación de Hakata, la principal de Fukuoka y próxima al aeropuerto de la ciudad, toma la línea JR Kamome hasta la estación de Saga y, una vez allí, haz transbordo a la línea JR Karatsu. El viaje de Hakata a Ogi dura alrededor de 1 hora.

La localidad de Oji es famosa por sus dulces yokan, unos deliciosos postres de gelatina elaborados con una pasta de alubias pintas y azúcar.

Aquí, también hay varios restaurantes especializados en la carpa koi, por lo que los expertos y amantes del sushi estarán encantados de saber que aquí podrán degustar un sashimi único en su categoría. Aquí puedes probar también el famoso plato de suculenta ternera de Saga.

Si te dejas caer por algunas de las tiendas de sake de Ogi, te percatarás de que tienen unos sakes llamados Tenzan y Takasago, los cuales están elaborados con agua natural pura del monte sagrado Tenzan.

A muy poca distancia a pie de la estación de Ogi, se encuentra el parque homónimo, un enclave idílico para hacer meriendas y pasear tranquilamente. Este lugar es especialmente hermoso durante el otoño y también en primavera. Los más de 3000 cerezos florecen simultáneamente en todo su esplendor durante la época primaveral.

El monte Tenzan es uno de los lugares favoritos de los lugareños para salir a hacer senderismo.  

El santuario Suga-jinja es un rincón que no puedes perderte durante tu visita a Ogi. Lo que hace inconfundible a este santuario es la larga escalera de 153 peldaños que lleva hasta el vestíbulo principal, situado en la cima de esta gigantesca colina. No hay ninguna otra forma de subir hasta él, solo una buena resistencia física. Una vez en la cima, verás un pequeño sendero que lleva a un mirador, con unas vistas que te dejarán boquiabierto. En primavera, la zona alrededor del mirador se llena de bellos cerezos en flor.

Una lugar que no puedes perderte son las cascadas de Kiyomizu , un lugar sagrado de la secta budista Tendai. Para llegar a las cascadas, deberás atravesar varios puentes situados sobre el río Gion. Los arces muestran sus más espectaculares tonalidades en otoño.