Parque Conmemorativo de los Mártires Cristianos de Oita キリシタン殉教記念公園

El Parque Conmemorativo de los Mártires Cristianos de Oita está dedicado a la fe inquebrantable y a la lealtad religiosa de aquellos que fallecieron durante la purga cristiana de Japón, que tuvo lugar en el siglo XVII.

La forma más fácil de llegar al parque desde la estación de Oita es en taxi. Si tienes coche, puedes aparcarlo en la zona.

Las líneas principales JR Kyudai, Hohi y Nippo pasan por la estación de Oita y dan acceso a la mayor parte de la zona de Kyushu.

En el siglo XVI, durante el reinado del señor de la guerra (daimyo) Otomo Sorin, prosperaron la cultura y los creyentes cristianos en la actual Oita , y muchas personas se convirtieron a esta religión.

Sin embargo, a principios del siglo XVII se prohibió el cristianismo y miles de fieles fueron arrestados y ejecutados al negarse a renunciar a sus creencias. Este parque conmemorativo se creó para rendir homenaje a los 200 residentes locales que murieron como mártires cristianos.

Otomo fue uno de los señores de la guerra de la época que se convirtió al catolicismo romano. Estableció lazos comerciales con los barcos portugueses que llegaban a las costas de la actual Oita . De este modo, la ciudad se convirtió en el punto de contacto principal entre Japón y Occidente.

Sorin conoció a san Francisco Javier, jesuita misionero y uno de los primeros europeos en desembarcar en Japón. Tras su llegada en 1549, el santo viajó durante dos años por Japón para predicar la palabra. Gracias a san Francisco Javier, tuvo lugar la primera incursión real del país en el mundo del cristianismo.

Tras la prohibición del cristianismo en el siglo XVII, los presuntos fieles se vieron obligados a pisotear imágenes sagradas para demostrar que no pertenecían a la religión. Otros se convirtieron en «cristianos ocultos», obligados a prácticas clandestinas para escapar de la persecución o a incorporar sus ritos al sintoísmo y budismo japoneses.

Otros se negaron a renunciar a su fe, aunque esto implicase la muerte. En la actual Oita, muchos mártires perdieron la vida. En el pueblo de Katsuragi, donde se encuentra el Parque Conmemorativo, alrededor de 200 mártires de todas las edades eligieron la muerte antes que condenar sus creencias religiosas.

Visita el parque para conocer la historia que se esconde tras este período de conflicto religioso y rinde homenaje a la fe inexorable de los mártires de Oita. El parque está plagado de monumentos con información y desprende una atmósfera de serenidad y paz increíbles durante el atardecer.