Duomo Ediciones tiene en su catálogo una de las obras de literatura contemporánea japonesa que más ha dado que hablar en los últimos años, 'La dependienta'. Sayaka Murata ganó por esta novela el premio Akutagaka, el galardón literario más prestigioso de Japón. Gracias a este hecho, la obra ha sido traducida a numerosas lenguas. ¡Esperamos que dentro de poco el resto de las obras de la autora lleguen a España!
'La dependienta' es una novela corta narrada en primera persona en la que conoceremos el día a día de Keiko Furukura, una mujer de 36 años que trabaja a tiempo parcial como dependienta en una tienda de conveniencia o como se conocen en Japón, konbini. Keiko desde pequeña tiene la sensación de que no encaja en la sociedad y, de hecho, a menudo le cuesta entender las relaciones sociales, en las que participa valiéndose de mimetizarse con lo que observa en sus allegados y compañeros de trabajo.
Bajo una apariencia sencilla, su pequeño tamaño y estilo cercano, se esconde una historia profunda que sin duda invitará al lector a la reflexión sobre como solemos exigir a todo quienes nos rodean que encajen dentro de lo que se considera normalidad. Es un libro muy peculiar y al mismo tiempo con el que es sencillo sentirse identificado y empatizar con la protagonista.
'La dependienta' supone una oda a la rutina, al día a día, al trabajo bien hecho y una defensa a ultranza de la necesidad de romper con los cánones que marcan una forma estándar de vida.
Un libro para leer de una sentada y sentir por un momento, que paseamos por Japón y nos perdemos en los olores, sonidos y sabores de un konbini. Te invitamos a leer las primeras páginas del libro aquí.
Las tiendas de conveniencia en Japón. ¿Qué es un konbini?
Imagen de Andrew Leu en Unsplash
El término konbini viene de la adaptación al japonés del inglés convenience store (tienda de conveniencia). Estos establecimientos son toda una institución en Japón, se caracterizan por abrir las 24 horas del día 365 días al año y ofrecer toda clase de productos y servicios de necesidad básica, ocio y, por supuesto, alimentación y bebidas. Los konbini cuenta exactamente con la misma iluminación y temperatura durante todo el día, por ello, cuando se está en su interior, es fácil olvidar qué hora es.
En Japón hay muchas cadenas diferentes de konbini (Seven Eleven, Lawson, Family Mart, Sunkus… y muchas otras cadenas locales) y en las principales ciudades se encontrará este tipo de establecimientos cada pocos metros.
Los konbini son un aliado de los locales, pero también de los viajeros que recorren Japón. ¿Por qué? ¡Tienen todo lo que necesitas! Aparte de los alimentos y bebidas, que hablaremos más adelante, ofrecen todo tipo de servicios de utilidad, por ejemplo: cajeros automáticos (ATM) para sacar dinero o comprar entradas para ciertos atractivos turísticos, cuentan con máquinas fotocopiadoras e impresoras, ofrecen lavabos para clientes, servicio postal y de pago de facturas… Por otro lado, venden objetos que pueden sacar de un apuro a cualquiera como cepillos de dientes y otros productos higiénicos, calcetines, ropa interior, pilas y mucho más. También comercializan prensa y algunos souvenirs locales, dependiendo de la zona.
Imagen cedida por Érase una vez Japón (@eraseunavezjapon)
Como comentábamos anteriormente también cuenta con secciones de alimentos. Por un lado, tienen una enorme variedad de snacks, dulces y salados, donde el cliente puede pasar horas eligiendo qué probará ese día. ¡Recordad además que en Japón es muy habitual que haya productos estacionales por lo que tal vez, cada vez que vayas encontrarás opciones diferentes! Por otro lado, hay una enorme oferta de productos frescos o comidas preparadas, tanto frías como calientes, todas ellas preparadas ese mismo día (e incluso dentro de la misma jornada, según la hora, se irán ofreciendo diferentes alimentos). Pueden comprarse alimentos japoneses como onigiri y bandejas bento, pero también sándwiches, cestas de pollo frito o pasta. ¡La variedad es realmente sorprendente!
La sección de bebidas tampoco decepcionará a nadie puesto que los konbini cuentan con cientos y cientos de opciones de refrigerios, calientes y fríos, con alcohol y sin alcohol, con gas y sin gas, con azúcar y sin azúcar… ¡Os aseguramos que os costará elegir! Además, normalmente los konbini cuenta con máquinas de café para quien prefiera hacérselo en ese momento en vez de comprar uno en lata. Las máquinas ofrecen la opción de tomar café caliente o con hielo, ¡perfecto para el verano!
Imagen cedida por Érase una vez Japón (@eraseunavezjapon)
Los konbini de mayor tamaño tienen también zonas para de descanso con mesas y sillas para consumir lo que se ha comprado. Eso sí, no es habitual ocupar los lugares durante tiempos muy prolongados. También suele haber estaciones de carga de dispositivos y calentadores de agua y microondas para quienes necesiten prepararse unos fideos instantáneos o calentar una bandeja de comida.
Honestamente, es imposible no amar los konbini. Eso sí, después de leer La dependienta, aprenderás a apreciar todo el trabajo que hay detrás de ese gran servicio que ofrecen. ¡Lee sus primeras páginas aquí!
