Experiencias Viajeros Conducir en Japón: Todo lo que necesitas saber para alquilar un coche en Japón. Experiencia de Érase una vez Japón

Somos Érase una vez Japón y nos encanta todo lo relacionado con la cultura japonesa.

Hace unos años estuvimos en Hokkaido, una preciosa isla al norte de Japón, que nos enamoró al instante y que, desde entonces, recomendamos visitar. ¡Seguro que os encanta!

En nuestro caso, alquilamos un coche para poder disfrutar de los lugares más escondidos de la isla. Si bien puede dar un poco de vértigo enfrentarse a las carreteras de un país tan diferente, te aseguramos que, ante todo, es una experiencia divertida y súper segura. ¿Quieres saber cómo alquilar un coche en Japón? Sigue leyendo porque te vamos a explicar todo lo que necesitas.

¿Cómo alquilar un coche en Japón?

Una de las mejores maneras de ver el país es moviéndote en tren. Gracias al billete Japan Rail Pass podemos exprimir al máximo este transporte, pues nos permite llegar a prácticamente todos los rincones de Japón de una manera cómoda y rápida.

Sin embargo, en ocasiones es preferible alquilar un coche. Bien porque no nos cuadren los horarios del transporte público o simplemente para ahorrar tiempo a la hora de llegar a nuestro destino.

Puede que de primeras dé algo de vértigo enfrentarse a la conducción de un vehículo en un país desconocido, sobre todo en un lugar con un idioma tan distinto. Aun así, te adelantamos desde ya que no vas a encontrar ninguna dificultad y que la experiencia va a ser de lo más curiosa.

En nuestro caso hemos alquilado un coche dos veces, en concreto en la isla de Hokkaido, para poder disfrutar de sus parques nacionales y así explorar zonas donde el tren no llega. Por ello, si aún tienes alguna duda de cómo es el proceso de alquilar un coche o cómo es conducir en Japón, has dado con el mejor artículo.

Pasos para conducir en Japón

1. Carné internacional

Si pensabas que con tu licencia de conducir ya era suficiente, siento comunicarte que vas a necesitar, además de tu carné, otro que lleva por nombre “Carné internacional”.

Todo se remonta a 1949, cuando se celebró en Ginebra una convención sobre la circulación vial. Allí, muchos países discutieron la manera de establecer algunas normas igualitarias que favorecieran el desarrollo y la seguridad de la circulación internacional y dejando claro aspectos importantes a la hora de poder conducir en Japón, Italia, México…etc. Entre esas reglas se estableció que los ciudadanos de esas regiones podrían circular por sus territorios con sus carnés internacionales.

En esencia este carné es una traducción a varios idiomas de tu permiso de circulación, que es emitido por la oficina de tráfico de tu país de residencia. En el caso de España, es la DGT la que emite el carné internacional, con una validez de un año. Para poder obtenerlo, has de pedir cita previa en tu oficina cercana, rellenar un documento que proporciona la propia DGT, entregar tu carné de conducir acompañado de una foto tipo carné actual y finalmente pagar una tasa de 10€. 

Así, en unos minutos tendrás tu carné internacional. ¡Recuerda que este trámite se hace ANTES de ir a Japón!

2. Reservar el coche

En Japón hay un montón de empresas de alquiler de coches. Las más populares son Toyota, Mazda, Nissan o Nippon Rent a car. Sin embargo, existen también otras empresas más conocidas en el mundo occidental, como Sixt, Hertz, Avis…etc. Cualquiera de ellas te permite reservar un vehículo de manera online, eligiendo el tipo de coche que quieras, así como los accesorios que necesites.

3. Recogida del vehículo

Esta es la parte que puede que te dé más vértigo, ya sea por el idioma o porque pienses que el trámite es diferente al que se lleva a cabo en tu país. ¡No te preocupes, es muy sencillo!

Cuando llegues a la oficina de alquiler, entrega tu carné de conducir, el internacional (sin este no te darán el vehículo) y tu pasaporte, que fotocopiarán para completar tu ficha. Entonces te explicarán algunas señales originales japonesas, como el STOP, pues es distinto al occidental. Además, te informarán de que en Japón se conduce por la izquierda, de que no podrás aparcar en zonas que no estén señalizadas como parking, que está terminantemente prohibido conducir bebido y unas cuantas cosas más enfocadas a una mayor seguridad. Te lo explicarán todo en inglés e incluso en algunas empresas te proporcionarán un pequeño documento explicativo en dicho idioma o en otros. 

Una vez tengas las llaves, una persona de la oficina irá contigo para que los dos comprobéis los daños del vehículo y así no tengas que pagar en un futuro por posibles desperfectos que vinieran de antes. Como ves, todo está siendo exactamente igual que cuando alquilas un coche en Madrid, en Barcelona o en cualquier otra ciudad de tu país. 

Es entonces cuando el empleado de la oficina te explicará cómo funciona el GPS, cómo se arranca el coche y alguna cosa más, todo ello dependiendo del vehículo alquilado. Una vez termine con toda la ceremonia de entrega podrás comenzar tu aventura en coche. 

4. Conducir por Japón

A nosotros nos encanta conducir en Japón, tanto por la seguridad, la limpieza y el mantenimiento de las carreteras niponas; como por la educación y la amabilidad de los conductores japoneses. A continuación, te detallamos algunas cosas a tener en cuenta para que no te pillen por sorpresa:

- Se conduce por la izquierda. Pon especial cuidado a la hora de girar una calle: no os quedéis con el coche en el carril contrario. Hablo desde la experiencia de haberlo vivido una vez. ¡Menos mal que los japoneses son, ante todo, amables y pacientes!

- Los coches son automáticos. Ten cuidado con querer usar el embrague porque puedes dar un buen frenazo. Y como sé qué harás lo mismo que nosotros, te dejo un pequeño listado con todas las posiciones: P es Parking (parar), D es Driving (conducir), N es Neutro (punto muerto) y R es Reverse (marcha atrás). ¡De nada! 

- Otro dato importante es que los intermitentes están en la parte derecha y los limpiaparabrisas en el lado izquierdo.

- En Japón se conduce MUY LENTO en comparación con España. No te pases de los límites de velocidad porque hay bastantes controles. Cúrate en salud y ve a la velocidad indicada en la vía,  en general, 40km/h en ciudad, 80-100km/h en autopistas y 30-60km/h en otras vías.

- Las distancias, aunque parezcan cortas, pueden llevarte mucho tiempo. Planifica bien tu viaje para no tardar en exceso y no perderte cosas.

- Prepárate para pagar muchos peajes en autopistas o puentes. Eso sí, hay algunos pases de peajes que te permitirán pagar por una “tarifa plana” de peajes según la región donde vayas a moverte.

- No aparques en ningún sitio que no esté indicado como parking, pues podrían multarte.

- Las salidas y algunas indicaciones están en japonés y en rōmaji (alfabeto romano, es decir, el nuestro)

- Los semáforos están situados enfrente del cruce donde pares. Colócate en la línea de detención y espera a que se ponga en verde o se ilumine la flecha de dirección del sentido al que quieras ir. Sin embargo, yo os aconsejo que hagáis lo que haga el de delante. ¡Por si las moscas!

5. Repostar gasolina

Otra de las cosas que tal vez te pueda dar un poco de miedo es repostar gasolina por los mismos motivos que os he dicho anteriormente: ya sea por el idioma o por si el proceso es distinto al que estamos acostumbrados. 

Hay dos tipos de gasolineras: las que cuentan con personal y las que son de autoservicio. 

Las primeras son muy cómodas, pues no hace falta salir del coche. Uno de los empleados te indicará dónde parar, te preguntará por el tipo de gasolina (tendrás que mirar en los papeles del alquiler, aunque ya te adelantamos que la gran mayoría de coches en Japón son de gasolina a la que llaman “Regular”) y cuánto quieres repostar. En algunas gasolineras, incluso, te limpiarán el parabrisas delantero y te darán un trapo para que hagas lo mismo con tu salpicadero. Una vez haya terminado el repostaje te darán la cuenta, pagarás y otro de los empleados parará el tráfico para que puedas salir con la máxima seguridad.

Si por el contrario vas a repostar en un autoservicio, tendrás que tener en cuenta el color de cada tipo de combustible: rojo (Regular), amarillo (Alto octanaje) y verde (Diésel). Cada surtidor cuenta con una pantalla donde seleccionarás el tipo de combustible y la cantidad. Puedes encontrar, con suerte, alguna pantalla en inglés, aunque la mayoría están en japonés. Aun así, no son tan complicadas y podrás apañarte perfectamente. Una vez seleccionado todo, deberás pagar en efectivo y, en algunos casos, con tarjeta. Al terminar el repostaje podrás continuar con tu camino.

6. Devolución del vehículo

Una vez hayas disfrutado de esta aventura tocará devolver el coche. Procura entregarlo lo más limpio posible, es decir, no dejes bolsas llenas de comida, papeles, bolsas...

Recuerda que la gran mayoría de casas de alquiler te pedirán que devuelvas el coche con el depósito lleno, por lo que deberás dirigirte a una estación de servicio cercana antes de la devolución.

Una vez llegues a la oficina, entrega los papeles del alquiler, tu carné de conducir, el carné internacional y el pasaporte para finalizar el servicio. Cuando comprueben que todo está correcto, tu experiencia conduciendo por Japón habrá llegado a su fin.

En definitiva, conducir en Japón es una experiencia totalmente diferente y que te ofrece una mayor libertad a la hora de visitar algunos lugares. En nuestro caso, cuando visitamos Hokkaido, pudimos usar el JR Pass, pero preferimos utilizar el coche para llegar a los rincones más profundos de la isla. Nuestro consejo es que valores qué puntos quieres visitar y a partir de ahí considerar si alquilar o no un coche.

¡Esperamos que te haya resultado de interés este post! Puedes consultar información sobre rutas recomendadas para recorrer Japón en coche aquí y seguir conociendo a Érase una vez Japón en su página web y sus redes sociales.